MI DEVOCIONAL DIARIO - 2 CORINTIOS 1

Escrito el 19/08/2025
Centro de Vida

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2 Corintios 1 Nueva Versión Internacional 1 Pablo, apóstol de Cristo Jesús por la voluntad de Dios, y Timoteo nuestro hermano, a la iglesia de Dios que está en Corinto y a todos los creyentes en toda la región de Acaya: 2 Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo les concedan gracia y paz. El Dios de toda consolación 3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación, 4 quien nos consuela en todas nuestras tribulaciones para que, con el mismo consuelo que de Dios hemos recibido, también nosotros podamos consolar a todos los que sufren. 5 Pues, así como participamos abundantemente en los sufrimientos de Cristo, así también por medio de él tenemos abundante consuelo. 6 Si sufrimos, es para que ustedes tengan consuelo y salvación; y si somos consolados, es para que ustedes tengan el consuelo que los ayude a soportar con paciencia los mismos sufrimientos que nosotros padecemos. 7 Firme es la esperanza que tenemos en cuanto a ustedes, porque sabemos que, así como participan de nuestros sufrimientos, así también participan de nuestro consuelo. 8 Hermanos, no queremos que desconozcan las aflicciones que sufrimos en la provincia de Asia. Estábamos tan agobiados bajo tanta presión que hasta perdimos la esperanza de salir con vida: 9 nos sentíamos como sentenciados a muerte. Pero eso sucedió para que no confiáramos en nosotros mismos, sino en Dios, que resucita a los muertos. 10 Él nos libró y nos librará de tal peligro de muerte. En él tenemos puesta nuestra esperanza y él seguirá librándonos. 11 Mientras tanto, ustedes nos ayudan orando por nosotros. Así muchos darán gracias a Dios por nosotros[a] a causa del don que se nos ha concedido en respuesta a tantas oraciones. Pablo cambia de planes 12 Para nosotros, el motivo de satisfacción es el testimonio de nuestra conciencia: Nos hemos comportado en el mundo, y especialmente entre ustedes, con la santidad y sinceridad que vienen de Dios. Nuestra conducta no se ha ajustado a la sabiduría humana, sino a la gracia de Dios. 13 No estamos escribiéndoles nada que no puedan leer ni entender. Espero que lleguen a comprender todo, 14 así como ya nos han comprendido en parte, que pueden sentirse orgullosos de nosotros como también nosotros nos sentiremos orgullosos de ustedes en el día del Señor Jesús. 15 Confiando en esto, quise visitarlos primero a ustedes para que recibieran una doble bendición; 16 es decir, visitarlos de paso a Macedonia y verlos otra vez a mi regreso de allá. Así podrían ayudarme a seguir el viaje a Judea. 17 Al proponerme esto, ¿acaso lo hice a la ligera? ¿O es que hago mis planes según criterios meramente humanos, de manera que diga «sí, sí» y «no, no» al mismo tiempo? 18 Pero tan cierto como que Dios es fiel, el mensaje que les hemos dirigido no es «sí» y «no». 19 Porque el Hijo de Dios, Jesucristo, a quien Silvano, Timoteo y yo predicamos entre ustedes, no fue «sí» y «no»; en él siempre ha sido «sí». 20 Todas las promesas que ha hecho Dios son «sí» en Cristo. Así que por medio de Cristo respondemos «amén» para la gloria de Dios. 21 Dios es el que nos mantiene firmes en Cristo, tanto a nosotros como a ustedes. Él nos ungió, 22 nos selló como propiedad suya y puso su Espíritu en nuestro corazón como garantía de sus promesas. 23 ¡Por mi vida! Invoco a Dios como testigo de que todavía no he ido a Corinto solo por consideración a ustedes. 24 No es que intentemos imponerles la fe, sino que deseamos contribuir a la alegría de ustedes, pues por la fe se mantienen firmes.

LECTURA :2 de Corintios 1

OBSERVACIÓN:

La segunda carta de Corintios es la segunda carta que Pablo le escribió a la iglesia de Corintio, una iglesia que él mismo ayudó a establecer en la ciudad griega de Corinto. En el momento en el que estaba escribiendo esta carta, ya habían pasado muchas cosas entre él y los corintios, sobre todo desde que les escribió 1 Corintios desde la ciudad de Éfeso aproximadamente un año antes. Pablo viajó a Corinto, pasó por un momento difícil con ellos hasta el punto en el que las cosas no acabaron muy bien del todo. Después les escribió otra carta,  entonces, Pablo les envió esta carta después de recibir las noticias de su colaborador Tito, quien estuvo en Corinto y le dijo que los corintios habían cambiado su opinión y su actitud hacia él.
 

MEDITACIÓN

Vamos a detenernos en los vs. 3 y 4

Pablo a menudo comienza sus cartas expresándole a Dios el agradecimiento que sentía por todos sus lectores y la manera en que Dios estaba obrando en sus vidas. Esta vez, sin embargo, Pablo comienza alabando a Dios por el consuelo que les ofrece a todas las personas que lo están pasando mal. Cuando Dios consuela a las personas, esas personas pueden usar ese consuelo para consolarse los unos a los otros. Pablo conecta el sufrimiento cristiano con el sufrimiento de Cristo, y también conecta el consuelo que Dios nos ofrece durante ese sufrimiento con el consuelo que Cristo recibió también cuando Él mismo sufrió en la Tierra.

3."Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación."

  • Este versículo declara que Dios es la fuente de la misericordia y el consuelo.
  • La misericordia implica sentir compasión por el sufrimiento de los demás y actuar para ayudarles.
  • La consolación se refiere a la ayuda, el apoyo y el acompañamiento que Dios ofrece en momentos difíciles.

"el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios."

  • Dios nos consuela en nuestras pruebas y sufrimientos para que podamos usar ese mismo consuelo para ayudar a otros que están pasando por dificultades.
  • La idea es que la experiencia propia del consuelo divino nos capacita para ser agentes de consuelo para los demás.
  • El sufrimiento puede ser una oportunidad para aprender a consolar a otros

estos versículos resaltan la naturaleza compasiva de Dios, quien no solo nos consuela en nuestras tribulaciones, sino que también nos capacita para ser canales de consolación. Dios se preocupa por mí y mi sufrimiento no pasa desapercibido ante él.

La pregunta es ¿estoy buscando consuelo en su Palabra y en la oración? Soy capaz de ver que otros también necesitan ese consuelo y les abrazo como Dios lo hace conmigo?

ORACIÓN

Dios, gracias porque mi dolor y sufrimiento no pasa desapercibido ante tus ojos y recibo esa ayuda de tantas formas que puedo ver tu misericordia y amor por mí. Ayúdame a ser ese canal de consuelo para quienes están atravesando dolor y que en mí se vea a Jesús. Amén